Sigo y ahora de la mano que Quien nunca me soltará. Ya no eres tú, con tus efímeras palabras, la que me hacen acelerar el corazón. Ahora es Él, que tiene las palabras infinitas que llenan mi corazón. Esta vez no es otra ilusión, es Realidad, es Verdad, esa que me encontró en medio de un firmamento que parecía oprimir mi razón.
Mi vida ha cambiado, ya no soy la de antes, soy feliz, por fin, pues tengo la certeza de que sigo el camino correcto. No hay más temores a caer, porque sé que siempre me sostendrá. Nunca antes pude entender su Amor de esta forma pues vivía centrada solo en mis necesidades, pero gracias al silencio y mis lagrimas, a esos dolores agudos y constantes descubrí que existía una Felicidad y Paz dentro de mi que ningún problema podía apagar.
No sé si algún día encontrarás la felicidad, que he hallado, pero deseo que la vivas y que puedas ver que existe solo una Verdad, que está dentro de nuestros corazones. Ahora entiendo que no la encontrarías si seguías junto a mi, espero te dejes tocar por Él y por fin esos resentimientos y dolores se vayan de ti, que puedas sonreír como lo hiciste conmigo alguna vez.
¿Si te sigo queriendo?, pues sí, sin embargo ahora que comprendo que el amor es una elección y no un sentimiento, hoy he decidido que es mejor estar lejos de ti porque lo nuestro no puede ser amor sin el Amor. Nuestras prisas, hicieron que fuésemos tan rápido como para ver que lo nuestro solo era una emoción que tarde o temprano acabaría por nuestros egoísmos, por nuestra falta de conocimiento, paciencia y fe.
Ahora mis lagrimas no son de dolor, son de felicidad y de resignación, porque sé que te volverás a a enamorar y quizás a desenamorar como de mi, pero sé que por fin yo podré sonreír para siempre esperando y confiando en que mi futuro no es incierto, sino que esta ya previsto por Él, mi amor incondicional. Aquel del que nunca debí alejarme, pero que siempre me recibe con sus brazos abiertos.
Gracias Señor, sé que siempre tuviste un camino bello para mi, que no pude ver por estar centrada en la tierra. Pero gracias a los errores de ayer, estoy más convencida de que solo quiero hacer tu Voluntad. Aún faltan cicatrizar estás heridas, pero por lo menos ya han sido curadas por Ti y tu Misericordia infinita. Dame la valentía para abandonarme a tus planes por siempre. Te amo inmensamente, y aún así, mi amor es insignificante comparado a tu amor por todos nosotros.
Atte, tu dulce fragilidad .. :)
