miércoles, 27 de mayo de 2015

Once 19

Hemos terminado hace más de 3 meses, no puedo negar cuanta falta me haces en este día gris, pero al mismo tiempo voy comprendiendo que existe también un hasta nunca. 

Mi impulsividad y mis costumbres han acabado con el poco cariño que quedaba entre ambos y tú inmadurez e inestabilidad me han hecho derramar mil lagrimas de decepción al sentir traicionado un amor, que creí incondicional. Fueron once meses de risas, alegrías, tristezas, llantos, besos, caricias, también de vacíos que no pudieron ser llenados jamás. Nos empeñamos en hacer de la vida un sueño, donde creímos que los obstáculos se borrarían por arte de magia, así sobrepasamos lo que   para muchos era imposible,  juntarnos, tú y yo en una relación que terminó estrepitosamente.

Quizás has sido el amor más importante que tuve y con el que he compartido más bellos momentos, te idealice tanto que creí que eras el mejor chico que pude conocer en mi vida.  Es cierto que me hiciste feliz en algún momento, pero sabes que nunca lo fui totalmente, porque tus "peros" me devolvían a la realidad de nuestras diferencias. Te he querido tanto, me apegue tanto a tu amor, que por un momento no concebí el vivir lejos de ti, pero hoy que estamos sin comunicarnos y que van formándose en un boceto a lápiz mis nuevos sueños, descubro que hay un futuro que no es ir de la mano contigo. No es fácil aceptarlo y es que la mente comprende, pero el sentimiento no termina sin el tiempo ni la distancia necesaria para observar que el Firmamento es aún más inmenso que el amor, que creí fue real. Y tiempo, es justo lo que busco ahora para poder visualizarme de nuevo sola en un mundo que a veces parece no tener compasión de mentes tan idealistas como la mía.

Te has llevado parte importante de mi vida, quizás las ilusiones más grandes que pude tener, eso es lo que más duele y lo que cuesta aceptar, que pudimos ser tanto o un para siempre y ahora somos"nada", de la cual solo quedan palabras que hoy parecen no tener ningún sentido. Me dijeron que no era amor, y es cierto, fue una ilusión, un inicio de algo que pudo continuar y no me culpes solo a mi de los fracasos ni de los errores, porque cada cosa que realice la soportaste, nunca buscaste una solución más que el reproche, más que el huir cuando habían problemas, nunca hablaste solo guardabas silencio como esperando que llegará ese 19 de febrero que se convirtiera en un adiós definitivo. Es imposible no sentir tristeza en este momento, pero no es imposible salir de esta trampa en la que caí por seguirte, eso te lo aseguro, aunque tenga que repetírmelo a mi misma mil veces para convencerme que puedo hacerlo: "Lo puedo superar, te puedo superar".

Sé que sería muy raro que puedas leer esto, pero igual no me iré sin agradecerte por dejarme los recuerdos mas dulces y amargos de mi vida, por hacerme sentir viva y enseñarme que puedo soportar dolores tan agudos sola. Nunca dudes cuanto te amé o te sigo amando, pues podrás criticarme y acusarme de cualquier cosa, menos de falta de sinceridad, porque sé que en el fondo de tu ser en tus noches más difíciles recuerdas mi mirada encendida  ante tus ojos que supieron ser la respuesta que buscó mi corazón cansado y frágil durante once "diecinueves".


Adiós, ex amor, gracias por enseñarme mi fortaleza en su máximo esplendor.
Tu Frágil locura.