domingo, 22 de junio de 2014

Ser y callar


A través del tiempo nos convertimos en lo que permitimos que se quede con nosotros, en lo que decidimos que viva en nosotros.

Esto es lo que soy y lo sabes,  no soy igual a ti y hasta quizás sea totalmente opuesta, aunque ambos lo neguemos, sé que no te puedo cambiar y, mucho menos, tú  a mi. Ante las interrogantes, para no sufrir. preferimos callar, ausentarnos, soñar y hasta hacer planes, pero el corazón en el silencio transmite, habla y duele, duele tanto, como esas veces en las que intenté alejarme de ti.

¿Cómo seguir caminando de tu mano?, si entiendo, en mis domingos de cordura, que mi camino va a un Destino diferente del tuyo, si sé que te amo, pero más lo amo a Él, que es amor verdadero. 

Siento un vacío permanente y diario, no puedo dejar de verlo cuando cierro los ojos antes de dormir, algunas veces también mientras estoy viéndome en el espejo. ¿Qué es esto que hoy no me deja en paz? No, no es divertido fingir que no lo sé, por no querer nombrarlo. En nuestras mentes sabemos la respuesta, pero otra vez preferimos callar.

Cabeza y corazón se contradicen y me van asfixiando hoy.

Dulce mentira.